El gobernador recientemente se encuentra en la actualidad en Washington D.C empujando para que se apruebe un proyecto de estatus para Puerto Rico. Si se aprueba, el proyecto consistiría en realizar un plebiscito en el que las personas de Puerto Rico deciden si prefieren la estatidad, independencia o que se mantenga el ELA.

¿De verdad el gobernador piensa que esto ayudara a la situación actual de Puerto Rico? 

La respuesta es que no. Actualmente hay problemas MAS SERIOS e IMPORTANTES que se deben atacar, y el gobernador, estando en Washington D.C ahora mismo, podría empujar más estos otros problemas EN VEZ de un plebiscito que nunca surte efecto.  

Por ejemplo, recientemente el gobierno federal RECHAZO la solicitud para ajustar las tarifas del Programa de Medicare Advantage de Puerto Rico. Esto significa que el programa de Puerto Rico se encuentra en un 39% inferior al promedio nacional y 21% inferior al de las islas vírgenes.1 Esto es DEVASTADOR para las personas que tienen ese plan e igualmente para las personas que ofrece los servicios de salud en la isla. Este rechazo del ajuste, más el aumento en los costos de servicios médicos, tendrá un efecto negativo en la industria, el cual impedirá que los servicios puedan mejorar, y las personas más necesitadas no puedan acceder a estos. 

¿Porque el gobernador no está hablando de esto en Washington?

¿Dónde está el compromiso con sacar adelante a Puerto Rico?

EL gobierno se olvidó completamente de las personas mayores de la isla y claramente no son una prioridad para ellos, ni para el gobierno federal. Un plebiscito no DEBE de ir por encima de las personas, ni de un servicio TAN ESCENCIAL como es la salud.

¡El gobierno tiene que reorganizar sus prioridades y luchar para mejorar el problema AHORA!